26.2.10



"por veredas de sueño y habitaciones sordas
tus rendidos veranos me acechan con sus cantos
una cifra vigilante y sigilosa
va por los arrabales,
llamándome y llamándome"

22.2.10

"Sí, pensó Clemens, al shock room. Tóquenle una docena de discos de jazz, pásenle un frasco de clorofila por la nariz, pónganle hierva bajo los pies, bañen el aire con perfume de Chanel, córtenle el pelo, arréglenle las uñas, tráiganle una mujer, grítenle, golpeen y hagan ruido; fríanlo con una corriente eléctrica, llenen los abismos y las hendiduras, ¿dónde está la prueba? Es imposible pasarse la vida inventando pruebas. Es imposible entretener a un bebé con sonajeros durante toda la noche, y todas las noches durante 20 años. Alguna vez tendrán que detenerse. Y entonces volverán a perderlo. Y eso si alguna vez les presta atención".

Nunca fui joven. Lo que fui o pude ser, está muerto. Siempre pensé que uno muere todos los días, y que los días son como cajones, ¿no?, con su tapa y todo. Y no hay que volver atrás, ni levantar la tapa, pues uno muere un par de miles de veces, uno come, respira, el corazón late millares y millares de veces, uno despierta, uno hace el amor, uno deja un montón de cadáveres y todos con una muerte distinta, con una expresión cada vez peor.
"Te apartas de tí mismo de ese modo", fue la respuesta.

5.2.10

"[...] Acuérdese de aquel adagio hindú que cita Schopenhauer: no hay loto sin tallo. O como decía el latino: nihil est sine ratione.

Hasta el sabio, canta el coro en el Prometeo encadenado, hasta el sabio tiene que doblar su rodilla ante Adrastea. Adrastea es lo inevitable. La rueda del Karma. What is done, cannot be undone, dicen en Macbeth. La teoría del Nous. Los demás tipos han vivido en Babia. Ahora están estupefactos. Son todas buenas personas, pero muy ignorantes, gente que no ha leído, que no ha profundizado, que no ha salido nunca del medio metro cuadrado donde nacieron. Entonces ¿cómo voy a hablar del mar con la rana que nunca salió de su charco? Gentes así no están capacitadas para interpretar, para juzgar in tuitu personae. Se quedan con el contorno, se conforman con la fachada postiza del mundo. En cambio, y permítame la vanidad, yo no, yo soy de aquellos que no ignoran que la realidad tiene dos caras, qué, dos caras, veinte caras, cien caras, y que la cara que más a menudo nos muestra es falsa y hay que saber buscarle la verdadera."